Seguro que alguna vez se os ha roto una uña y habéis pensado que cortarla era la única solución, pues no, podemos arreglarla de una manera muy sencilla sin usar productos profesionales, sino con cosas que solemos tener por casa. Vamos a necesitar pegamento para tips o superglue en su defecto, un palito de naranjo, un lápiz, una bolsita de té y esmalte transparente.
Lo primero es eliminar el esmalte que podamos tener de manera que nuestra uña quede completamente limpia como veis en la imagen número 2. Luego, ponemos una gotita de pegamento en el palito de naranjo y la aplicamos justo en la rotura haciendo presión con el palito para que se pegue.
Ahora damos una capa de esmalte transparente sobre nuestra uña y con cuidado ajustamos el patrón que hemos recortado sobre la uña.
Dejamos que seque y recortamos el papel que nos sobre de la punta de la uña. Para terminar, damos una capa de esmalte por encima para dejar una textura suave. Una vez seco podemos dar color a nuestra uña como normalmente.
De esta forma lo que conseguimos es dar tiempo a la uña para crecer, evitando que se enganche y pasando más desapercibida. Para quitarlo, simplemente tenemos que desmaquillar nuestras uñas con quitaesmalte.
¿Lo habéis probado? ¿Qué os ha parecido?
Me ha encantado el truco!
ResponderEliminarGracias!
Gracias a ti por pasar por mi blog y comentar. Un beso!
EliminarEl truco va genial!!!! Yo lo hice una vez y la uña me duró lo suficiente para poder limarla con facilidad :D
ResponderEliminarBesos
Si verdad?? A mi es que se me rompen y a veces no me doy ni cuenta porque tengo las uñas muy blanditas, esto lo hago muchísimo. Un besote
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ResponderEliminarVoy a tratar de hacerlo! Se me acaba de partir mi uña muyyy arriba y no la quiero cortar ya que las tengo todas parejitas!
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